domingo, 26 de junio de 2011

EXPERIENCIA EN LA ESCOLETA



Quiero compartir con vosotr@s la experiencia vivida en estos últimos meses.
Comencé a trabajar en una guardería de niños entre 0 y 3 años. Fuí como refuerzo para ayudar en todo aquello que pudiera, ha sido una experiencia genial y muy constructiva
para mí.
Los niños me han entusiasmado desde siempre y con esas edades son una verdadera experiencia. Una de mis principales tareas era recibir  tanto a los niños como a sus padres o abuelos que eran los que habitualmente les acompañaban  (quiero decir desde aquí que los abuelos hacen una gran labor ayudando con los nietos para que sus hijos puedan trabajar). Los niños entraban de todas maneras, unos medio dormidos, otros muy sonrientes y tranquilos, otros, algo más disgustados no querían entrar para dentro si no era al brazo de sus padres y los bebés la mayoría con una sonrisa que ya lo decía todo, los mas mayorcitos con un, “buenos días Concha”o el “adiós” cuando se iban, te llenaban de satisfacción.
La hora del comedor veías de todo, aquellos niños que les cuesta un mundo comer y los que se lo comen práctica y rápidamente todo; es una gracia verlos con babero y como la mayoría se ponen hasta arriba de restos de comida, eso sí, salen del comedor sin tan siquiera una miga en la cara.
Otra tarea que se me asignó, fué ayudar a las cuidadoras de los bebés, a dormirlos después de las comidas, había quien no tardaban nada en quedarse dormido, pero los mas mayorcitos, eran la mar de espabilados y les costaba un poco más; era gratificante cuando los veíamos ya todos dormiditos, cada uno en la postura que había encontrado mas cómoda para hacerlo, me encantó y guardaré buen recuerdo siempre de ello.
Os podría contar montones de anécdotas, pero me voy a centrar en dos, las que más me han llamado. En el comedor un niño de 2, 3 años era muy pulcro para comer, no soportaba ensuciarse, cuando acababa recogía las migas de la mesa con sus manitas para que su espacio quedara limpio. La otra es un niño de 2 años, sus padres tanto por la mañana como al medio día lo traían en bicicleta, eso si con mucha seguridad, su casco puesto y bien amarrado de cintura y pies, el mencionarlo es por lo feliz que venía y lo contento que se ponía cuando salía y ver que la bici estaba fuera esperándole, yo en ese momento pensaba que aún viniendo sus padres con el mejor coche que haya en el mercado, no se hubiera sentido mejor, además que llegaba con un “buenos días Concha” y se marchaba con  un “hasta mañana Concha”, que llenaba de satisfacción. El primer día que su padre lo oyó se quedo un tanto parado incluso lo comentamos, el niño hacía lo que oía a sus padres, aparte de que siempre hay niños mas tímidos y vergonzosos que otros.
En cuanto al personal, yo que lo he vivido desde dentro, os he de decir que se desviven por los niños a la par que los enseñan, según la edad, lo que les corresponda. Conmigo se han portado muy bien y el día que me despedía,  me hicieron entre todo el personal el detalle que encabeza esta entrada, os podéis imaginar la mañana que pasé en cuanto a emociones.
Me han invitado el día 30 de Junio, que es el día que finaliza el curso y con todo el gusto que asistiré, me sentí feliz que lo hicieran y así poder volver a ver a los niños, ya que algunos acaban este año, para comenzar en el colegio.
No quiero pasar por alto los buenos momentos que he pasado también con la cocinera que tienen en el centro.
Desde este mi pequeño espacio, les quiero mandar a todo el equipo un fuerte abrazo y darles las gracias a ellas también por todo.
  


16 comentarios:

  1. Qué gratificante resulta el trabajo cuando lo que haces te apasiona ¿verdad?.

    Espero que te lo pases muy bien en esa fiesta.

    Besos

    ResponderEliminar

  2. Querida Concheta, ¿qué mejor trabajo que el que se realixa con mucho gusto? Ha sido una experiencia gratificante para ti y algo que perdurará en tu memoria.

    Felicitaciones y un fuerte abrazo con mucho cariño.

    ResponderEliminar
  3. Hola Concha:

    Que bueno, que hayas sido tan feliz con los pequeños.
    He disfrutado leyendo esta entrada.
    Besos desde Valencia, Montserrat

    ResponderEliminar
  4. Me alegro que hallas tenido un trabajo tan gratificante, porque trabajar con niños, como tu bien has dicho lo es. Yo lo veo en mi nieta que tiene14 meses, comparas lo que ase ahora con lo que hacia un mes antes y ves lo que ha aprendido, los progresos que ase, es muy bonito ver como empiezan a dar sus primeros pasitos, como van mostrando su carácter, esta mía es una desordena, tengo el cuarto de los juguetes muy ordenadito todo, llega ella y se pone a quitar cada cosa de su sitio y cuando tiene el cuarto patas arriba, entonces se pone a jugar.
    Pues nada Concha haber si te puedes enganchar para el próximo curso que ese es un trabajo de los que enriquecen en alma. Un besito

    ResponderEliminar
  5. Una de las mejores cosas que te puede pasar es que te guste tu trabajo y que disfrutes con él.
    Hoy día no todo el mundo puede decir eso ya que muchos trabajan en lo que pueden y no en lo que quieren. Un abrazo

    ResponderEliminar
  6. Cuando se trabaja en algo que gusta, la labor ser vuelve gratificante, gracias por compartir.
    un grato placer pasar por tu casa.
    feliz semana.
    un abrazo.

    ResponderEliminar
  7. La verdad María, que disfrutar del trabajo que estés realizando es muy gratificante. La fiestecita genial.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  8. La verdad Melba que guardaré un buen recuerdo, de estos últimos meses y además con mucho cariño.
    Un fuerte abrazo

    ResponderEliminar
  9. Me alegra mucho Montserrat, que te haya gustado esta entrada, ha sido tan buena la experiencia, que no he podido resistirme a compartirlo.
    Un fuerte abrazo

    ResponderEliminar
  10. Entiendo María Jesús que al tiempo que tu nieta te dá mucho trabajo, es muy agradecido verla crecer día a día y como bien dices aprendiendo muy rápido, los niños son muy listos. Con la edad que tiene la nena estará para comersela. Lo de desordenada, que niño no lo es, te pasas el tiempo recogiendo sus cosas.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  11. Hola Chelo, la verdad es que me siento al respecto una persona muy afortunada, siempre he trabajado en lo que me ha gustado y así se disfruta mucho de lo que haces y repercute en todo, ya me entiendes ¿no?. Aunque alguna mala experiencia todos hemos tenido también.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  12. Gracias Ricardo por tu comentario, siempre es bueno hacer lo que a uno le gusta, aunque no siempre se consigue.
    Un placer también recibirte por aquí.
    Feliz semana para tí también, aunque con una de retraso.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  13. Simplemente maravilloso lo que tienes por este blog, tambien me quedo por aquí. Besitos de lascomidasdecarmen
    Feliz descanso

    ResponderEliminar
  14. Agradezco Carmen tu comentario y que te haya gustado este blog, también el que te hayas quedado por aquí.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
  15. En primer lugar quiero darte las gracias por visitar mi blog y seguirlo. Tu entrada es muy hermosa. Es maravilloso que existan personas como tú en este mundo que cuiden de los niños y además leyendote siento que te encanta hacerlo. Ellos necesitan mucho de los adultos responsables para crecer bien. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  16. Gracias corazón verde, por seguir también mi blog y tus entrañables palabras.
    Espero seguir en contacto contigo, te pondre un enlace.
    Un abrazo

    ResponderEliminar